23/3/10

Querubines de dios

S. Menor tenía dos añitos, yo estaba culo al norte fregando el piso cuando siento sus pasitos, sonaban raros y me paro de golpe, en medio del mareo porque me había dado cuenta de que mi sangre estaba en otro lado, la pequeña blandía un cuchillo con cara de psicótica (te lo juro por la sangre de quien quieras) y se acercaba...despacio, mirándome a los ojos y apuntando el arma blanca hacia mí:
-PENEEEEJAAAAA
Con una vocecita ronca fingida. Después largó la carcajada.
Me espanté, pero un poquito nomás.

Recordé este pequeño incidente en estos días cuando, delante mío en el colectivo, se sientan una hermana adolescente y su hermanito de dos añitos (aprox. esto a ojímetro), quien claramente le hizo notar a su hermana que quería ir del lado de la ventanilla, ella le decía que en el trecho más largo le daría el sol (hacía calor ese día).
-Nomimpota.
-Bueno, má si...jodete
Al rato, cuando el colectivo estaba a reventar de gente escucho que el chiquillo llora y llora cada vez con más ganas.
A upa de su hermana (deduje que era la hermana porque fui hermana adolescente de hermano chico, S. Mayor sigue la misma línea) y una señora mayor sentada del lado de la ventanilla.

-Bueno, calmate si ya falta poco.
-Nomimpota sho quedo mi achiento.
-Bueno pero tenemos que dar el asiento cuando hay mucha gente.
-NOMIMPOTA TE IJE, AHODA LA VOY A MATAD A ETA VIEJA, LA VOY A COTAD Y LA VOY A TIDA EN PEACITO PO LA VENTANA.

3 comentarios:

Unknown dijo...

¡Amorcete!

Cariñito de mi corazón...

Unknown dijo...

Pluf. Soy yo. Milenius, pero desde la cuenta del laburo.

Abrujandra dijo...

Son unos angelitos ququi disfrazando a Milena