20/9/13

Dolores masculinos

Mi masculinidad se cae constantemente cuando me miro al espejo, cuando tengo el coraje de mirarme al espejo a los ojos.
La cabeza hierve constantemente, en segundo plano, con esa certeza de que si hay luz, hay una sombra tuya proyectada en perfecto ángulo.
Sé que nada va a llenar este vacío, mentiras de papel, mentira, mentira como cuando me siento a comer y pienso que es eso exactamente lo que me va a satisfacer y el segundo bocado es nada porque vos no estás.
Todo se vuelve fácil si me siento delante de la tarotista y me miento que le creo, busco respuestas a esto, algún lado por dónde escapar un lugar donde estén las respuestas a nuestras preguntas.
Me anestesio pero no sirve porque el efecto no dura para siempre, como todo, lo sé.
No quiero no durar, pero no logro terminar de arañarte de mi cabeza.
Poco me cuesta imaginarte en otros cuerpos, sólo apago la luz y ahí estás, en esa respiración agitada sobre mí, en ese olor a sexo casi común en todas las mujeres que pasan un rato en mi cama.
Sé que sentís lo mismo que yo pero a la vez tengo la absoluta seguridad de que no nos quedan oportunidades, no al menos en esta vida y me miento que habrá otra donde finalmente, estar juntos no duela así.
Me destruyo imaginándote sobre mi pierna izquierda acurrucada como si ese fuera el único lugar en el universo donde podés estar.
Quizás la próxima vez sea peor porque todo muta alrededor y nosotros también.
La única manera de dejar de quemarme la cabeza es darme un tiro o tres pero acá estoy, en mi casa, con mi mujer, con algunas amantes, con mi música, con mis pantuflas, algo de vos y todo, no me voy a matar porque vos, ahora, estás viva.





11 comentarios:

PATRI dijo...

AMIGA ESCRIBIS MUY BIENNNN

PATRI dijo...

AMIGA ESCRIBIS MUY BIENNNN

PATRI dijo...

AMIGA ESCRIBIS MUY BIENNNN

PATRI dijo...

AMIGA ESCRIBIS MUY BIENNNN

PATRI dijo...

AMIGA ESCRIBIS MUY BIENNNN

Anónimo dijo...

Excelente !!!! hasta parece la realidad de muchos...

Abrujandra dijo...

PATRI: muchas gracias.

ANÓNIMO: los dolores son lugares comunes, muchas personas se sienten identificadas, siempre fue un misterio para mí el dolor masculino, la sensibilidad que esconden porque en esta sociedad (y en las anteriores, aún más) deben mostrarse fuertes y casi como si nada les importara.
Las masculinidad tiene ese atractivo aún mayor si esa coraza se trasvasa de alguna manera.
Y sí, es sorprendente el comportamiento humano en algunas circunstancias, los ves de afuera y no podés imaginar lo que hay dentro.
Besos.

el oso dijo...

El comportamiento humano es una cosa cuando se racionaliza y otra cuando se emocionaliza, me parece.
Acertadísimo, Abrus!
Besos

Abrujandra dijo...

Oso: ¡Qué honor!
Gracias.

Besos

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Muy bien escrito. Lo de una mujer y las amantes parece ser la mejor estrategia para que el protagonista le duela menos el dolor de que una mujer se haya ido. Claro que tambien podria empezar a disfrutarlo.

Abrujandra dijo...

Gracias Demiurgo, son anestesias que cada quien usa como mejor puede, creo.
Un beso.